Por Santiago Caballero
¿Cómo sé que necesito para armar mi home studio? ¿De qué depende? ¿Qué interfaces me recomiendan? ¿Qué micrófono es mejor? ¿Necesito monitores?
Surgen muchas preguntas a la hora de querer crear un espacio de trabajo profesional que nos ayude a lograr una mejora en la calidad y organización para nuestras propuestas musicales, el cual debe estar compuesto de herramientas especializadas para la producción tanto en hardware como software.
El tema de los home studios se encuentra tan saturado de información en internet hoy en día, que para muchas personas resulta confuso saber que es lo que mejor se adecua a sus necesidades. Es por eso, que esta guía te instruirá en la toma de decisiones en base al tipo de trabajo que realizarás.
En primer lugar, hay que tener en claro en que parte de la producción musical vas a trabajar, ya sea si te vas a dedicar a la pre producción (maquetas y arreglos), producción (grabación) o post producción (edición, mezcla y mastering), siempre será necesario delimitar tu especialidad para saber que equipos requerirás y centralizar tu inversión.
Además, al tomar esta decisión hay que ser conscientes de que uno mismo no puede dedicarse a todos los rubros de la producción, ya que solo se invertiría demasiados recursos sin lograr resultados al mismo nivel que una persona especializada.
¿Sé en lo que quiero especializarme? ¿En qué soy mejor o a que me quiero dedicar?
En segundo lugar, una vez seleccionada el área de producción hay que definir que elementos de hardware y software se van a necesitar para trabajar, por lo que es necesario conocer la cadena de grabación musical.
Cadena de Grabación Musical
Toda cadena de grabación se basa en la conversión de señales análogas a digitales por medio de conversores integrados en las interfaces, los cuales procesan la información obtenida de una fuente a través de un medio (como un micrófono, controlador o instrumento por línea) para convertirla en su equivalente en lenguaje de computadora (0 y 1), trasmitiendo así la información a la estación de trabajo de audio digital (DAW) y devolviéndola a la salida de la interfaz (monitores o audífonos) por un proceso inverso (de digital a análogo).
La interface sería el eslabón más importante en la cadena de grabación, siendo la responsable de procesar toda la información recibida, la cual va a provenir de una fuente directa (a través de las entradas) como un micrófono, un instrumento o controlador) el cual es previamente amplificado por la misma interface con el fin de aumentar la ganancia de la señal enviada por la fuente.
Entre mejor sea la interface, mejores procesos de conversión A/D (análoga/digital) y D/A va a tener, capturando con más detalle y calidad la señal de la fuente emisora. Así mismo, tendrá mejores pre amplificadores para transformar la fuente emisora en una señal bien amplificada y con poco ruido de piso.
Dentro de los elementos de grabación de la entrada de la interfaz, la señal es emitida por una fuente emisora donde el sonido va a depender de si el instrumento es de buena calidad, si esta afinado, si las cuerdas son nuevas o esta calibrado, o si el cantante tiene buena técnica, buena transmisión del mensaje de la canción, entre otros elementos.
Esta fuente emisora va a ser captada como ya vimos más arriba por un medio receptor o transmisor como un micrófono (condensador, dinámico o de cinta), un cable TRS o plug, o un controlador MIDI a través de información en lenguaje de computadoras. Siendo muy importante utilizar buenos cables para su trasmisión a la interface y de la interface a la computadora (esto evitará posibles interferencias o ruidos estáticos).
Otro elemento que interviene en el gráfico son los monitores o audífonos, los cuales se encargan de trasmitir la señal una vez procesada, por lo que va a depender de sus respuestas de frecuencia para saber como se va a escuchar el sonido (aumento en los graves, agudos o una respuesta más plana y objetiva).
Un elemento poco relevante para muchos pero muy importante es el espacio donde se va a realizar la grabación o escucha, el cual debería contar con un tratamiento para obtener mejores resultados al eliminar frecuencias indeseadas, exceso de reverberación, filtración de ruido, entre otros problemas.
Por último, interviene toda la parte de software iniciando con el DAW (Pro Tools, Logic Pro X, Ableton Live, Reaper, FL Studio, Cubase, etcétera) donde se va almacenando toda la información grabada y procesada para editarla o usarla más adelante a libre creatividad. Así mismo, existen otros complementos llamados plugins que funcionan con el sonido permitiendo manipularlo tanto en su dinámica, ecualización, efectos de modulación, reverberación, entre otras funciones como emulaciones de hardware antiguo para otorgar mayor calidez a la mezcla.
Una vez que ya conocemos la cadena de grabación, debemos comprender que existe un principio que se aplica para todos los elementos de la cadena, donde el resultado final va a depender del eslabón más débil de la cadena.
Por ejemplo, si invierto 1000$ en una interface con muy buenos conversores y pre amplificadores como la Apogee, pero grabo con un micrófono económico de 100 soles, o no tengo un espacio con tratamiento acústico adecuado, de nada me va a servir haber invertido tanto en un buena interface porque mi sonido será malo, ya que este también proviene del micrófono y del espacio en mayor porcentaje.
¿Grabar música no es tan sencillo no? ¿Entonces porque enfocarnos en cosas que otros pueden hacer de manera más eficiente y con mejores equipos?
La música va a requerir de muchos procesos y elementos que conversan entre sí, siendo la colaboración una parte esencial para mejorar los resultados, creando equipos de trabajo con músicos (con buenos instrumentos, dominio de técnica y sonido), ingenieros de audio y estudios de grabación (los mejores equipos y espacios acústicamente tratados para resultados profesionales), ingenieros de mezcla o mastering (equipos especializados para cada uno de los procesos, tratamiento acústico diferente al de sala de grabación), productores (encargados de crear y estructurar todo lo que se va a ejecutar y grabar).
Además, cuál es la necesidad de invertir tanto dinero en equipos caros si es más rentable que alquiles un estudio con mejores equipos a precios cómodos para grabar las horas que necesites y conseguir una mejor calidad en las tomas, las cuales puedes utilizar posteriormente desde la comodidad de tu home studio y editarlas a tu antojo.
Es Necesario Definir Nuestro Objetivo
¿Que buscas hacer en el estudio o a que te vas a dedicar?
Por ejemplo, para hacer arreglos de canciones quizás no vas a necesitar monitores porque solo te centrarás en grabar con un instrumento o un controlador y será mejor invertir en buena calidad de grabación con interfaces con mejores conversores de audio, mejorar la acústica del espacio donde grabas (sobre todo con respecto al aislamiento), o invertir en un buen controlador y librerías de sonidos para optimizar tu tiempo.
Si te vas a dedicar a mezclar, no debes aspirar a una interfaz con los mejores conversores; por lo contrario tu eslabón mas importante de la cadena que hemos revisado serán los monitores o audífonos para tener las referencias mas exactas posibles. De igual manera, lo mejor sería que inviertas mas que todo en software con plugins para mezcla que te pueden hacer lograr un sonido único y solicitado por mayores clientes que alguien que utiliza los plugins gratis de siempre (no es algo obligatorio pero necesario si quieres sobresalir).
Si lo tuyo es la grabación, lo mejor será que inviertas en la acústica de tu espacio, una buena interfaz con buenos conversores y con un número de salidas acorde a los instrumentos que vas a grabar. Una vez trazado ese camino, si quieres obtener aun mejor sonido lo mejor será adquirir hardware de compresión, pre amplificación o ecualizadores que le otorguen más brillo a la mezcla y micrófonos. Llegados a este punto, este quizás sea el rubro de la música que más va a requerir de una inversión, por lo que hay analizar bien si eso es lo que se busca o si simplemente quieres producir música y tener un espacio para elaborar maquetas, revisar las cosas que grabaste al alquilar otro estudio o reunirte con los artistas.
Estas elecciones van a depender siempre de lo que uno tenga en mente, es por eso que no se puede abarcar mucho ya que habrá deficiencias en la cadena de grabación y los resultados serán bastante malos.
Si lo que tu deseas es más un home studio para trabajar tus ideas, maquetas y escuchar las tomas que grabas o lo que te envían otras personas lo indispensable es contar con una interface de 1 canal, salida a monitores o un par de audífonos y un DAW cómodo para crear y hacer demos de tus canciones como Logic Pro.
Hay bastantes marcas hoy en día con precios accesibles y calidad de grabación, como por ejemplo las de la marca Focusrite, o interfaces de mejor calidad como las Apollo o Apogee. Micrófonos de relación calidad/precio como los Audio Technica AT2020 o series de Blue como el Blue Bird o Spark.
En PMA sabemos que muchas veces conseguir estos equipos no es posible por factores económicos, pero el talento de una persona no debe esperar y prosperar, por eso hemos lanzado un sorteo donde te puedes ganar un pack completo de Focusrite para que puedas grabar inmediatamente.
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