¿Qué es el éxito?
Cuando mi padre estuvo aislado en el hospital Rebagliati por coronavirus no llevó su celular, a pesar de eso igual le escribía para que cuando salga del hospital pueda leer todo lo que deseaba para él. En estos mensajes le decía que sea fuerte, que luego de vencer esta enfermedad sería un ser nuevo, un hombre mucho más sabio y que seguramente compartiría su experiencia como una anécdota con mucha gente.
Al final, un 3 de junio del 2020 mi padre falleció, luego de una larga semana de lucha. Al ser el único no contagiado de la familia, tuve que asumir la responsabilidad de hacer muchas gestiones ese día, por ello, me di cuenta del nivel de la tragedia luego de hacer todos los trámites en la morgue, llegué a mi casa y lloré como nunca en mi vida. Fue una tragedia muy grande, hasta ahora nada comparable.
Ese día, mucha gente me llamó a darme el pésame, y la verdad no tenía ganas de escucharlas, nada podía sanar mi dolor. Sin embargo, surgió algo particular. Todas las personas que me llamaron no me dijeron “mi más sentido pésame” sino “tu padre me enseñó esto”, “tu padre me ayudó en esto”, “tu padre fue como un padre para mi”, etc.
El día de ayer, jueves 26 de abril, me hicieron una entrevista en el programa “Un Éxito de Miércoles” de la Universidad de Ciencias Aplicadas – UPC, universidad en la que estudié música.
Y luego de muchas preguntas interesantes acerca de mi experiencia profesional en la industria o mi vida en la universidad, me hicieron una pregunta final. La verdad me agarraron frio.
– «Bueno Pedro, llegó la hora de despedirnos, pero no sin antes hacerte la última pregunta: ¿para ti qué es el éxito?»
Sonreí – “Para mí el éxito es compartir”
La respuesta fue automática, no pensé ni un segundo, solo dije lo que aprendí de mi padre al fallecer. A pesar de que fue el más grande mayorista de Lima Gas a nivel nacional, y que creó una empresa muy sólida en vida; cuando falleció, nadie habló sobre eso, sino sobre lo que él hizo por mucha gente. Creó puestos de trabajo, enseño a hacer empresa a muchas personas, haciéndolos parte de su red de distribución, ayudó a los que más lo necesitaban, sean o no trabajadores suyos, potenció negocios, aconsejó a mucha gente, e incluso vi en varias oportunidades como ponía sus recursos a disposición de los demás, si alguna emergencia lo ameritaba.
Recuerdo que un tío lejano muy querido por la familia, estaba en el hospital padeciendo de leucemia, y necesitaba urgente donantes de sangre. Mi padre paró las operaciones en la empresa y subió a todos los trabajadores al camión más grande, tanto personal de ventas como administrativo, suspendiendo todo. Motivando a todos a estar unidos con el único objetivo de ayudar. Así era mi padre.
Por esa razón, para mí ese es el éxito. Tener la oportunidad de ayudar, o compartir, desde el frente en que te encuentres, desde el lado profesional, desde el lado empresarial, desde el lado familiar, desde el lado personal. Siempre podemos compartir algo e impactar en alguien de manera positiva, siempre.
Si al morir la gente habla de ti y te recuerda con cariño por lo que impactaste en su vida, ese es el verdadero éxito.
Al final mi padre nunca despertó, tampoco se volvió más sabio, eso creo…pero sí, me dejó la lección más importante que jamás olvidaré. #SonIdeas